Los programas de reciclado de latas de bebidas que la Fundación Trinijove está llevando a cabo en el aeropuerto de Barcelona, aeropuerto de Málaga, Port de Barcelona y hoteles son un claro ejemplo de que el binomio Economía Social-empresa puede funcionar perfectamente en el campo ambiental y así se explicó en el Congreso de los Diputados. Arpal colabora en estos programas desde el inicio.

La Fundación Trinijove asistió el pasado 17 de octubre al Congreso de los Diputados, a la Comisión de Economía y Hacienda y, en concreto, participó en la subcomisión para estudiar la situación de la Economía Social en España. Sus representantes fueron Carmen Parra, profesora de derecho internacional de la universidad Abad Oliba CEU,  presidenta del observatorio de la economía solidaria y miembro del Patronato de la Fundación Trinijove e Ignacio Parody, secretario general de la misma Fundación.

Durante las exposiciones, se explicó la importancia que tiene la Economía Social en la coyuntura actual donde, a pesar de haber crecimiento, también hay unas bolsas de pobreza importantes y unos colectivos que sufren precariedad y extrema dificultad de inserción.
“Para nosotros, la economía solidaria es una economía de valores, es una economía para trabajar, intentar mejorar el entorno, por eso es una economía que trabaja mucho por la cohesión territorial. Entendemos que el territorio es el que nos tiene que dar las soluciones, ahí está el núcleo de la vida y donde las personas se tienen que encontrar bien, y por ello intentamos desde nuestro trabajo incentivar a que empresarios, ayuntamientos, asociaciones, trabajen dentro de lo que sería un territorio socialmente responsable”, explicó Carmen Parra.

La Fundación Trinijove es un claro ejemplo de que el binomio economía social- empresas funciona muy bien, en concreto en el campo de la sostenibilidad y el medio ambiente. Y lo demuestra con realidades como es la colaboración con Arpal para fomentar el reciclado de los envases de aluminio. Gracias a sus programas de recogida selectiva y formación en el Aeropuerto de Barcelona, Port de Barcelona, Aeropuerto de Málaga y diversas cadenas de hoteles (Princess Diagonal  Hilton Diagonal y AC Diagonal, AC Gavá, AC Son , AC Miramar, Pedro IV. Todos ellos en Barcelona ciudad y provincia) se consigue un claro beneficio ambiental (recuperación de envases usados que se convierte en materia prima para fábricas) y un beneficio social: inserción laboral de colectivos con riesgo de exclusión.
Todo esto se explicó en el Congreso de los Diputados y se citó expresamente la labor que la Fundación Trinijove  realiza con Arpal y otras asociaciones de materiales de envase.

“Trabajamos por la sostenibilidad del medio ambiente y lo hacemos con acciones que existen, o sea, no con utopías. Yo quiero sobre todo, por ejemplo, exponer la experiencia que ha trabajado la asociación de la que soy patrona, Trinijove, que lleva a cabo todo el reciclaje en el aeropuerto de Barcelona a través de una empresa de inserción en la que están trabajando personas que provienen de la exclusión social y que, en definitiva, estamos uniendo lo que es la defensa del medio ambiente con otro sector, que es el de la exclusión social, que está encontrando a través de la inserción por lo económico nuevas vías para trabajar dentro de lo que sería el ámbito empresarial”, matizó Carmen Parra.

Por su parte, Ignacio Parody explicó más detalladamente estos programas y cómo las entidades de Economía Social y la empresas o asociaciones empresariales pueden ser realmente complementarias:
“Nosotros estamos complementando el trabajo de muchas empresas en el ámbito de la responsabilidad social corporativa, están subcontratando unos servicios y esos servicios los estamos haciendo bien. ¿Por qué? Porque nosotros, al contrario, por ejemplo, de una empresa temporal de colocación, no detraemos ni un duro al trabajador. ¿Por qué? Porque el ser empresas solidarias que estamos haciendo este trabajo, estamos vinculando a organismos externos a apoyar ese proceso de producción.
Por ejemplo, Aena y el aeropuerto de Barcelona, como decía mi compañera, y Trinijove están haciendo la recogida de residuos, si no fuera una organización de economía solidaria yo estoy convencido de que organizaciones patronales como Arpal, Ecoembes y Ecovidrio no apoyarían ese proceso y facilitarían los bienes de equipo gratuitamente a la Fundación Trinijove.”, expuso Ignacio Parody.